Lámpara de Selenita
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Lámpara de Selenita Grande

45,00 €
Impuestos incluidos

Lámpara de Selenita.

Cada Lámpara de Selenita viene completa con bombilla y enchufe.

Altura 22-30 cm y ancho 10-11 cm

Cada Lámpara es una pieza única.

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Selenita (en griego, selēnē, 'luna'), es una variedad del sulfato de cal, sulfato de calcio hidratado, un mineral de rocas sedimentarias, de los primeros en formarse por la evaporación de agua marina en los lagos y mares cerrados. Se llama así porque, según una leyenda de Europa central, los cristales se forman en luna creciente. Es incolora, blanca, a veces con lustre perlado o satinado, muestra una transparencia especial, glacial, fina, estriada y muy delicada. Se distingue de los demás minerales por su suavidad. La mayor parte de los cristales de selenita son estriados y las largas líneas sobresalientes en toda su longitud animan y canalizan una energía de alta frecuencia a través del cuerpo entero del cristal.

Los especialistas en Feng Shui recomiendan este tipo de lámparas como armonizador del entorno ya que al calentarse por efecto de la bombilla instalada en su interior, emite iones negativos beneficiosos para el ser humano.

Una forma de conseguir aumentar los iones negativos en el hogar es instalar una lámpara de selenita, y contribuirá también a reducir los agentes contaminantes del aire.

Como propiedades más relevantes la selenita aporta sentimientos de bienestar y optimismo. Es relajante y se recomienda a personas que padecen angustia y ansiedad, pues aporta tranquilidad y capacidad para solucionar problemas y afrontar vicisitudes. Combate la tristeza y la melancolía. Aporta sentimientos nobles y exalta las manifestaciones de dulzura y ternura. Es un mineral de amistades y relaciones, aporta arrojo y valentía y aparta la inseguridad que se tiene en algunos momentos. Se recomienda como amuleto en la toma de decisiones cruciales. Es buena compañera en los negocios y en las empresas, sobre todo en aquellas que empiezan. Aporta la facultad de ver las cosas con claridad, convirtiendo a su portador en un buen consejero.

A nivel físico, estimula el funcionamiento del aparato digestivo, combate la halitosis, desintoxica células, abre el apetito, tonifica los músculos, protege los huesos y mejora las úlceras. Es beneficiosa para tratar enfermedades que afectan al aparato respiratorio; regula la producción de adrenalina, protege los ovarios de quistes, y calma los dolores menstruales.

Está comprobado que los iones negativos que emiten estas lámparas pueden proporcionar una mejoría considerable en casos de alergias, dolores de cabeza y jaquecas, reduciendo la severidad de los ataques de asma, fortaleciendo el sistema inmune, aumentando la productividad en el trabajo, fortaleciendo la concentración e incluso reduciendo la susceptibilidad a la gripe.

Existe la terapia a través de los colores, en este caso el blanco (selenita) es el color de la pureza, la curación y la limpieza.

La luz blanca (selenita), por su parte, refuerza la concentración y ayuda en la claridad de ideas. Enriquecida por estas propiedades terapéuticas, la lámparas de minerales crean una atmósfera tenue y muy apacible, consiguiendo un ambiente agradable y natural que favorece el entorno y logra un beneficioso efecto sobre el estado físico y afectivo.

LS-G